Esta es la historia de Juan Carlos Rosero "alias el mono", un joven de 28 años de edad, trabaja como jardinero en la universidad mariana, tiene una niña de 5 años, su esposa Alexandra córdoba, una mujer de 25 años de edad, trabaja en un almacén de ropa en el centro. juan carlos se graduó del colegio san juan bosco, sus pasatiempos es jugar fútbol, billar, sapo y salir a tomarce una que otra cerveza con los amigos, vive en el barrio santa barbara al oriente de pasto. hace 5 años vive en unión libre con alexandra, tiempo en el que lleva trabajando en la universidad. el nos dice que el estudio es fundamental y nos ha contado que tiene muchas aspiraciones de seguir estudiando y buscar un trabajo mejor.
Nunca es tarde para aprender
cuando hablamos de superacion, nos referimos a esas emociones que nos adentran a ese camino rumbo al exito. podemos decir que la motivacion de algo, es una luz al final del tunel y ese reto que nos hace segui adelante.
Asi nos enseña juan carlos de que la humildad es algo maravilloso, de que a la vida hay que enfrentarla y de escoger un camino en el cual poner nuetros ideales.
Con su oberol que lo caractriza como personal de apoyo de universidad juan carlos se levanta todas las mañanas y se dirigirce al lugar de trabajo, en el cual le da el pan de cada dia, esto es algo de admiracion, de enseñanza. hay muchas personas en las cuales no valoran lo que tienen hasta que lo pierden.
juan carlos un muchacho con mucho sueños en al vida, tiene el valor de aguantar humillaciones y de sentir las clases sociales que amneja la universidad, pero debemos saber que todos somos iguales y hacemos parte de este mundo, no el que tenga plata tiene el derecho de hacerlo sentir mal, alcontrario el respeto y el saludar no se le niega a nadie, es una forma cordial y creo que el trabajo seria mas eficiente.
yo valoro mucho mi trabajo y le agradeaco a mi dios por brindarme la oportunidad de responder por mi hija, no todos tenemos la oportunidad de hacerlo, pero si quiero seguir adelante y volver a estudiar, cumplir mis sueños y demostrarle a mucha gente, de que nunca es tarde para estudiar.